Una tarde muy calurosa mi hermana Ana y yo estábamos en casa haciendo oficios del hogar, tuvimos una conversación larga y amena decidimos hacer algo para distraernos, ella me dijo :
- ¿Oye hermana, porque no invitamos a nuestros hermanos hacer un sancocho en casa del abuelo Froilan ?
Ella contesto:
- ¡ Buena idea ! exclamo.
Me comunique con ellos por celular para invitarlos, posteriormente ellos picaron verduras, otros encendieron el fogón y el resto jugaban domino, mientras yo conversaba con mi mamá, que tenia un sweter gris que le mando la abuela maría de España,estábamos sentados debajo de un árbol con deliciosas frutas.
Mientras veíamos los animales y los carros que transitaban , cuando la voz de mi hermano Carlos murmuro:
- ¡ vengan , vengan , la comida ya esta lista !
Nos levantamos y nos dirigimos al comedor y compartimos todos felices juntos .
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